El llamado contenido ‘evergreen’ es, sencillamente, aquel que nunca caduca. A diferencia de los artículos o publicaciones de ‘actualidad’, cuya vida no suele durar más allá de unos cuantos días (en ocasiones incluso horas, como los tuits), esta clase de contenido seguirá vigente durante bastante tiempo (meses e incluso años, dependiendo del tema y el enfoque con el que sea abordado). Las entradas evergreen son de suma importancia en toda estrategia de marketing, y en especial dentro del plan de contenidos, ya que suponen uno de los principales recursos de cara al posicionamiento SEO de una web o blog. En definitiva, de cara a dar visibilidad a nuestra empresa.
Claves del contenido evergreen
Para elaborar contenido evergreen de calidad hemos de tener en cuenta una serie de consideraciones. No basta con escoger una temática universal y atemporal y lanzarnos a darle a la tecla como locos. Previamente, es preciso atender a la estrategia por la cual se rige nuestra empresa, así como realizar un estudio del sector en el que nos estamos moviendo para saber qué tipo de contenido evergreen está generando nuestra competencia (y si le está funcionando o no). De este modo, estaremos en disposición de afrontar uno de los primeros requisitos de este tipo de entradas: la originalidad.
Aunque todos sabemos que a estas alturas es muy complicado crear algo del todo novedoso en Internet, al menos debemos intentar que aquello que contemos a nuestra audiencia resulte atractivo y no genere la sensación de que ha sido dicho antes una y mil veces. Ya que los temas que más posicionan en cuanto a SEO (porque son los más buscados) van a estar bastante trillados, la única opción que nos queda es esforzarnos por darles un nuevo enfoque, por utilizar un vocabulario y un tono sugerentes e intentar aportar un valor añadido. Es difícil, sí, pero el esfuerzo invertido será recompensado (a medio y largo plazo) con creces.
Crea ‘series temáticas’
Siguiendo con la idea esbozada en el anterior párrafo, otra de nuestras recomendaciones es que refuerces tus publicaciones evergreen elaborando series temáticas (aquello de que “la unión hace la fuerza” se ajusta a la perfección al tema que nos ocupa). Es decir, que a partir de un mismo tema crees varias publicaciones específicas y que se retroalimenten mutuamente. De este modo, estarás erigiendo una cadena temática que, con algo de suerte y bastante esfuerzo, te posicionará como uno de los referentes de tu sector. Para ello, la colocación de enlaces internos es una herramienta clave, por lo que tendrás que tener muy en cuenta tanto lo que ya has escrito como lo que tienes previsto escribir.
Por ejemplo, si tu web está enfocada en el diseño gráfico, un buen tema a partir del cual desarrollar varios posts sería la imagen corporativa de una empresa. Una entrada podría hablar sobre la definición de imagen corporativa, otra sobre los ejemplos más exitosos de empresas con una buena imagen corporativa, otra sobre las diferencias entre imagen corporativa e identidad corporativa, etc. Como verás, estos tres ejemplos están englobados en una misma área temática, pero responden a distintas cuestiones. De lo cual se deduce otro de los principales rasgos del contenido evergreen: cada entrada ha de ser específica y no andarse por las ramas.
Nunca pierdas de vista a tu target
Aunque esto pueda parecer una obviedad, ya que el público objetivo es una de las primeras consideraciones que se tiene en cuenta antes de comenzar cualquier campaña o estrategia, cuando hablamos de contenido evergreen es necesario replantearse la cuestión. Con este tipo de publicaciones nos dirigiremos a nuestro target predilecto, sí, pero dada su naturaleza (que nace de la intencionalidad atemporal que persigue), tendremos que segmentar dicho target y focalizar nuestras miras en aquella porción de nuestra potencial audiencia que está comenzando a informarse sobre el tema que vayamos a tratar. Dicho de otro modo, nos estamos dirigiendo a un público poco formado y no a profesionales del sector (ya que estos últimos conocerán al dedillo lo que les contemos y se aburrirán rápido leyéndonos). Un ejemplo sencillo de una hipotética publicación evergreen: ‘Tips para iniciarse en Photoshop sin morir en el intento’.