Todo solo de posicionamiento web vive el hombre, conocer otras herramientas de uso comercial nos ayudara con nuestros clientes.
El mundo de las aplicaciones es un filón. Y WhatsApp, el servicio de mensajería instantánea nº 1 en el mundo, su mayor exponente. Es difícil encontrar hoy en día a alguien que no tenga instalado este software en su dispositivo móvil. Pero, ¿sabías que también puedes usarlo también desde tu ordenador? Tal vez no le veas mucha utilidad a esto si solo utilizas esta app para tus comunicaciones personales. Pero hay una larga lista de motivos que justifican por qué usar WhatsApp en tu ordenador si lo que quieres es darle utilidades profesionales.
El WhatsApp en la gran pantalla.
Como si fuera una estrella de cine. Este juego de palabras nos sirve para destacar una de las principales ventajas de disponer del ordenador para usar esta aplicación. Los smartphones y las tablets son útiles, sobre todo, por el factor movilidad. Pero estaremos de acuerdo en que no se puede comparar con la comodidad y las prestaciones que pone a nuestro alcance un ordenador. Sobre todo, por su pantalla más allá de las 7 pulgadas y por sus prestaciones para tratar y archivar los contenidos.
Si usamos WhatsApp desde el ordenador podemos trabajar con documentos en distintos formatos, como textos en Word o Pdf, presentaciones en Power Point, trabajos en Excel o los codiciados Gifs. Podrás trabajarlos en tu ordenador y compartirlos o, al revés, recibirlos y archivarlos adecuadamente en la memoria de tu ordenador o en tu disco duro.
Por otro lado, es evidente que resulta infinitamente más cómodo teclear mensajes, adjuntar documentos o guardarlos desde un PC o un portátil. Y la facilidad de copiar y pegar textos con un solo clic, es otra de las ventajas que justifican por qué usar WhatsApp desde tu ordenador.
Además, tendrás la opción de recibir en tu gran pantalla las notificaciones de la aplicación o, si lo que quieres es evitar distracciones, desactivar esta posibilidad.
Ahora que ya sabemos por qué usar WhatsApp en tu ordenador, veamos cómo podemos conseguirlo.
¿Cómo acceder a WhastApp desde mi ordenador?
La verdad es que no tiene grandes complicaciones.
Por un lado, puedes acceder a la WhatsApp web desde tu navegador, siempre que dispongas de Windows 8 o posteriores o de Mac OS X 10.9. Por otro, puedes instalarte directamente la aplicación en tu ordenador. Para ello, debes actualizar la aplicación en su última versión. Luego, ves a ajustes del teléfono y borra el caché de la misma.
A continuación, dirígete al servicio web de WhatsApp (web.whatsapp.com) y genera el código QR. En último lugar, abre WhatsApp en el móvil, accede a Ajustes y pincha en WhatsApp Web. Usa el lector de código QR para escanear el que nos ha proporcionado antes el sitio de la aplicación y… voilà! Se abrirá directamente en tu ordenador y podrás utilizarla.
El sistema presenta algunas limitaciones.
De todas formas, ten en cuenta que el uso de esta app en el ordenador tiene algunas limitaciones:
Debes tener el teléfono activo y con servicio de datos disponible. Esto es necesario porque lo que usamos es como un reflejo de la app en el Smartphone y no a través del wifi del ordenador. Necesitarás disponer de Google Chrome, Firefox, Opera, Safari o Edge y de cualquiera de estos teléfonos para poder hacerlo: Android, Iphone 8.1+, Windows Phone 8.0 y 8.1, Nokia S60, Nokia S40 EVO, Blackberry y Blackberry 10. Tampoco podrás realizar llamadas desde allí ni añadir participantes. Podemos transferir archivos de una manera cómoda, pero siempre que no superen los 100MB.
Lo cierto es que ahora habrá que ver si WhatsApp acabe convirtiéndose en un competidor de real de otros servicios similares, como Line o Telegram, que disponen de versión propia para ordenador.
Usos profesionales para WhatsApp en tu ordenador.
Los gurús del marketing online están como locos son la versión del e-mail marketing que ofrece WhatsApp desde el ordenador. Se trata del fenómeno conocido como W-marketing, que convierte a esta app en una herramienta potente y efectiva para conseguir nuevos clientes.
Si se usa bien, abre nuevas vías de comunicación bidireccional con los clientes consolidados y también con otros que son potenciales. De todas maneras, recuerda que no podemos bombardear sin sentido a los usuarios con mensajes publicitarios porque pueden acabar bloqueándonos dentro de la aplicación.
Lo principal es ser selectivo con los envíos, segmentar bien el público objetivo y enviar siempre contenido que les resulte interesante.